La Ley Brisa, que a nivel nacional fue reglamentada en octubre del año pasado, preveé una reparación económica para las niñas, niños y adolescentes, cuyas madres han sido víctimas de femicidio. A pesar de su entrada en vigencia, los requisitos para acceder al trámite suelen obstaculizar el acceso a este derecho y es por eso que se solicita el cumplimento efectivo de esta reparación. En diálogo con «Hacete Amigo», una de las autoras del proyecto, la Diputada Silvia Augsburger detalló los fundamentos del mismo y se refirió a la documentación para acceder a este beneficio.
En los últimos diez años en el país más de 3500 niñas y niños se quedaron sin sus madres. La mayoría de ellos están al cuidado de familiares que ya tenían otros niños, con todas las consecuencias económicas y de impacto en la organización de la convivencia que ello significa.
Sobre la Ley Brisa
La ley 27452, aprobada en julio del 2018, estableció el derecho de niñas, niños, adolescentes o jóvenes cuyo padre haya sido procesado o condenado como autor, coautor, instigador o cómplice del delito de femicidio contra su madre a percibir una reparación económica, equivalente a una jubilación mínima hasta que cumplan 21 años, y en el caso de tener alguna discapacidad, de por vida. Se llama «reparación» porque se entiende que el Estado es responsable de garantizar salud, educación, alimentación, y una vida digna. Además, muchas de estas mujeres ya habían denunciado a estos varones por violencia de género.