La imagen es inapelable. El juez acelera el paso y embiste de lleno al entrenador de Racing Club, que cae desplomado. Quintana detiene el juego para que el DT sea atendido.
No fue justamente lo que pasó en el tramo decisivo del encuentro que Caza y Pesa ganó 81 a 80. La polémica acción llegó sobre la medianía del cuarto período.
Quintana apuntó a Rosanova. Se acercó y le propinó un fuerte empellón con el brazo izquierdo. Y claro, el coach estaba concentrado en lo suyo, dando indicaciones casi dentro del campo.
Después, la Liga Federal sacó un extenso comunicado donde aconsejó a los clubes que no se repitan actos violentos dentro de las canchas.
Las autoridades precisaron que se van a «tomar medidas provisionales de clausura o suspensión de categoría a quienes generen incidentes que interrumpan los partidos». Inexplicable.