Llegó a la ciudad hace casi dos décadas para trabajar en el fútbol amateur albiverde. Por entonces, nadie imaginaba que se iba a transformar en el técnico más importante de la historia de Unión.

Desde que el «Bicho Verde» obtuvo su primer ascenso al viejo Argentino «A» en el año 2003, muchos entrenadores de renombre pasaron a conducir el primer equipo, y previamente, la mayoría con más espalda que Adrián Tosetto.

Sin embargo, ninguno le dio tanto al club como el actual conductor. Es complejo saber si la chance le hubiera llegado sin aquella crisis económica que afectó a la «U», entre los años 2010 y 2011. Claro, desde el anonimato, «Chino» venía sumando estrellas de todo tipo en los torneos liguistas y se ganó un lugar como ayudante de campo en el banquillo más pesado.

Con el descenso consumado y un presente convulsionado, se puso en marcha la era de quien es el aún hoy DT albiverde. No hay dudas que los resultados lo acompañaron.

Igualmente, las cosas no fueron tan bien en el corto plazo. En el primer Argentino «B», la «U» marchó en la fase regular. Una derrota ante el «9» en el clásico regional lo dejó afuera de los playoffs.

En Avenida Belgrano se volvió a apostar por Tosetto y lo demás ya historia. La aparición de los Rojo, Soldano, López, Moino, Calamari y Juárez. Más las apuestas por jóvenes que paseaban su fútbol en las canchas de la zona, tales los casos de Molina, Vitarelli Góngora, Yuste y Mandrile, entre otros.

De esta manera, se fue gestando el ciclo más jugoso en la historia del fútbol de Unión. Sin aquellos grandes presupuestos que lo ponían como serio favorito a pelear por el ascenso al Nacional «B», los éxitos fueron llegando lentamente, uno a uno. Hubo frustraciones, claro está, pero la gente se sintió bien representada por los equipos de Tosetto. Los buenos resultados hicieron el resto.

¡Porque no hay héroes sin victorias! El ascenso al Federal «A» en 2015, la obtención de la Copa Santa Fe 2016, y la reciente en el «Cementerio de los Elefantes», y el posicionamiento de Unión en la plana mayor del Federal «A», fueron algunos de los logros.

Si Unión hasta se dio el lujo de jugar en Salta ante San Lorenzo de Almagro por Copa Argentina. Un tipo de convicciones claras. ¡Este es «Chino» Tosetto! Aunque no por ello le va bien. Además, trabaja con reglas claras, escucha a su cuerpo técnico y tiene autocrítica.

No le tiembla el pulso a la hora de tomar decisiones, y hay ejemplos de sobra durante estos 7 años. Con simpleza, humildad y seriedad, se ha transformado en un caso raro dentro del fútbol argentino: ser técnico durante tanto tiempo en un mismo club.

Unión suele ser un equipo ordenado, que trata bien la pelota, que piensa los partidos, mayormente, desde la tenencia de la misma, que juega con cuatro defensores, un medio campista de marca y un compadre de juego (generalmente con gol), dos volantes por afuera, y dos puntas.

Aunque más allá de cuestiones tácticas y estratégicas, el mayor logro de Adrián Tosetto es haberse ganado el respeto de los propios futbolistas, de sus pares, y haber convertido a Unión en un equipo ganador, pero además haciéndolo con una idea simple y clara que se respeta a raja tabla.

Tosetto es el padre de la criatura, un DT que no esconde las formaciones, que no cierra las puertas de los entrenamientos, que acepta las críticas, que dirige con su papá sentado a las espaldas y que se refugia en su familia en la pequeña y cálida Ataliva cada vez que puede. Simple.