La noche de este sábado en el NBA All Star Weekend concluyó con el siempre atrapante Concurso de Volcadas, plato fuerte del evento desarrollado en San Francisco.
El base del Magic de Orlando, pese a no haber debutado aún en la competencia más trascendente del mundo, ya se ha ganado un nombre en la NBA. ¿La razón?
Su creatividad y capacidad atlética para sorprender a propios y extraños.
El momento de la noche fue cuando el muchacho de 26 años saltó un auto y concretó una volcada de reversa. En ese momento todos supieron que volvería a ganar el torneo.
Con esta tercera estrella empardó el récord del diminuto Nate Robinson.