¡Se trata del tercer robo en un par de semanas! Esta vez los cacos se llevaron controles, una garrafa y un televisor. Además, dañaron puertas, rejas y cerraduras.
Esta claro que cualquier robo perpetrado en la ciudad genera angustia y enojo.
Sin embargo, cuando se trata de establecimientos educativos, clubes, centros de salud o entidades intermedias, la impotencia va en aumento.
Otro hecho de inseguridad en una ciudad que ya no tiene paz en tal sentido.
Fuente: Móvil Quique.