El intendente, Gonzalo Toselli, se tomará todavía unos días más antes de confirmar la nueva estructura del gabinete municipal que, en principio, debía entrar en funciones a partir de diciembre próximo, pero que ante la salida de Claudio Borra podría precipitarse para ser presentado antes de finalizar el mandato vigente.
Desde hace varias semanas, en tiempos de campaña electoral, ya se especulaba con renovaciones en la estructura del organigrama, tanto en cuanto a nombres como a jerarquías. Toselli se obsesiona con mostrar un formato innovador, pero los bocetos que se manejan solo contemplan cambios en la denominación de las áreas y enroques puntuales de algunas figuras que ya son parte de la plantilla política. Según versiones, no habría incorporaciones de extrapartidarios ni otras figuras que puedan contribuir a profesionalizar y oxigenar el actual equipo de trabajo.
Claudio Borra, titular de la secretaría de Hacienda, definió su alejamiento por razones estrictamente personales que le exigen tareas de menor stress y exposición, aunque seguirá vinculado al municipio, como asesor externo, hasta que culmine de armar el presupuesto para el próximo año en el que ya se encuentra trabajando. Toselli decidió provisoriamente no cubrir el puesto y delegar esas funciones en Magalí Díaz, actualmente a cargo de la contaduría. La medida puede resultar arriesgada por cuanto se prevén tiempos complicados, con finanzas menos holgadas, y crecientes demandas como las que en la última semana realizó una empresa proveedora local reclamando la regularización de una millonaria deuda y los pedidos de informes que vendrán desde espacios opositores, como lo hizo público el espacio de Unidad Ciudadana.
Fabrina Girard, secretaria de Gobierno, es otra de las integrantes del gabinete que ya le habría anunciado al primer mandatario su decisión de retirarse cuando termine esta gestión. Aunque Toselli intentará retenerla asignándole funciones que no la tengan en la primera línea de la gestión, lo más probable es que la excandidata oficialista al Concejo abandone en breve su periplo por la función pública.
Por su parte, el secretario de Obras Públicas, Leopoldo Bauducco, uno de los incondicionales de Toselli, también habría manifestado su voluntad de “pasar al desierto”, tal sus propias palabras en la emisora “Radio Sunchales”. Bauducco anticipó “grandes cambios en el gabinete” y pidió “profesionalizar” su área, aunque confesó estar a disposición para lo que el intendente decida.
Según anticipó Toselli, el nuevo organigrama contemplaría dos o tres secretarías destacadas y varias coordinaciones con campos de acción más específicos. Por el momento, la idea no termina de cerrarse y tampoco hay consenso sobre las designaciones para encabezar esas jefaturas. El objetivo es definir los cargos y jerarquías antes de presentar el nuevo presupuesto y demostrar una menor asignación de gastos para la plantilla política.
Mientras tanto, en rueda chica, se les ha pedido a los funcionarios que mantengan prudencia para comunicar estos acontecimientos. Oficialmente, las áreas de comunicaciones se manejan con total hermetismo y evitaron confirmar cualquier información referida a este tema, más allá de las lógicas filtraciones que se habitualmente se producen.
