La desazón de quienes viven en el pueblo vecino a San Francisco es muy grande. Es que, los robos están a la orden del día y las respuestas de las autoridades no llegan.
Otro caso puntual se dio el pasado sábado. Gustavo Niz es propietario de Pinturería S y S, comercio que está ubicado sobre la avenida central con una circulanción constante e intensa.
El comerciante se transformó en otra víctima más de la delincuencia.
Con una piedra le rompieron la vidriera de su local para robarle dinero y mercadería. A los ladrones ni siquiera les importó la presencia de una cámara de seguridad urbana.
En charla con «El Periódico», Gustavo Niz aseguró: «Pensaba que, cuando viene gente a comprar y no se conoce el rostro, enseguida aparece la idea de si no te quieren robar. Eso es feo».
Y subrayó: «De todas maneras, gracias a Dios el noventa por ciento de la gente de Frontera es muy buena. Desgraciadamente, por algunos pocos estamos intranquilos».
Fuente: El Periódico.