Así figura en la nueva Ley de Vacunación, aprobada por el Senado, que modifica los requisitos para las tramitación de documentos como pasaporte, DNI y licencia de conducir. La norma se aplicará tanto a adultos como a menores y establece la gratuidad y su exención impositiva. «El Estado deberá garantizar la compra de vacunas e insumos», señala el texto. Al respecto dialogamos con la Ministra de Salud de la Provincia de Santa Fe, Andrea Uboldi.
La norma establece que la «certificación del cumplimiento del Calendario Nacional de Vacunación debe ser requerida» para:
- Trámites de ingreso y egreso del ciclo lectivo obligatorio.
- Realización del examen preocupacional que llevan a cabo los servicios de medicina laboral.
- Tramitación de DNI, pasaporte y licencia de conducir.
- Tramitación de asignaciones familiares conforme ley 24.714 y de asignaciones monetarias no retributivas.
La «certificación» que habrá que presentar es el llamado Carnet Único de Vacunación (CUV), que la ley indica que deberá ser diseñado y contendrá las constancias de vacunación obligatoria. Podrá ser emitido por todas las instituciones habilitadas para vacunar, ya sea públicas, privadas o farmacias.
Será exigido también para tramitar las asignaciones familiares y exámenes preocupacionales. La ley aclara, entre varias cosas, que «la falta de cumplimiento de la presentación establecida no será obstáculo en la prosecución de los trámites».
Desde el Registro Nacional de las Personas, organismo que depende del Ministerio del Interior, dijeron que no se va a impedir la tramitación por no contar con el certificado de vacunas. El artículo 13 de la ley lo aclara cuando dice: «de modo tal de favorecer el acceso de la población a la vacunación en todas las etapas de la vida sin impedir la concreción de estos trámites».
Qué vacunas son las obligatorias:
A los adultos se les va a pedir el certificado que acredite que tienen aplicadas las de la hepatitis B y la doble bacteriana adultos. A los nacidos después de 1965, les corresponde también la triple viral (que protege contra sarampión, paperas y rubéola); no así a los mayores de 65 años (se consideran inmunizados), que sí deben darse la antigripal y las antineumocóccicas.
