Inspirado en el logro de Juan Carlos Zabala en Los Angeles 1932, el maratonista nacional se adueñó de la medalla de oro en Londres 1948, en una prueba que fue realmente emocionante.
Después de 42 kms, tres argentinos estuvieron entre los 10 primeros en lo que se recuerda como la actuación más importante del atletismo de nuestro país en la historia de los Juegos Olímpicos.